El trilingüismo al estilo de José Ramón Bauzá, basado en el TIL y que dejó de aplicarse en las escuelas de Baleares con el cambio de Govern, ha recibido la puntilla en la propuesta de modelo lingüístico escolar que este jueves examinó la mesa sectorial de Educación y que ahora tiene que pasar al Consell Escolar.
El documento, que parte de las conclusiones de una comisión de expertos y al que habrá que añadir las conclusiones a la que llegue la comisión parlamentaria que valora el Pacto Educativo, parte del llamado Decreto de Mínimos, que fija que la mitad de asignaturas deben impartirse «como mínimo» en catalán y establece como norma el decreto de lenguas extranjeras que aprobó el actual Govern en 2016 y que rigió el primer curso escolar completo desde el cambio de Govern el año anterior.
El STEI, principal sindicato de la enseñanza y representado en la mesa sectorial, quiere ir más allá y apuesta por una normativa que regule «al cien por cien» la enseñanza en catalán, garantizando el conocimiento de la «otra lengua oficial» (en alusión al castellano) e incentivando el conocimiento de otra lengua extranjera.
La directora general de Formació Profesional y del Professorat, Maria Alorda, destacó que todo el proceso ha sido consensuado desde el primer momento y señaló que ahora se recogerán más aportaciones.
La norma que definirá el modelo educativo de Balears, huye del plurilingüismo tal como lo reconocía el president Bauzá (y que motivó que cien mil personas salieran a la calle en contra del TIL) pero garantiza, según Alorda, el conocimiento de tres lenguas (catalán, castellano e inglés) al final del proceso educativo.
Ya no es, ni será obligatorio, que se impartan asignaturas en una lengua extranjera. Eso es optativo. Como máximo podrán impartirse dos materias no lingüísticas, pero si optan por dos, se requerirá una autorización expresa de la Conselleria. También se refuerzan los programas Erasmus y las relaciones internacionales entre centros.