El exconsejero de Economía y Hacienda de las Islas Baleares Carles Manera ha asegurado este jueves que la caída de la antigua Caja balear Sa Nostra se debió a que «actuó como un banco» en sus operaciones, y no «con el espíritu fundacional» de las cajas de ahorro.
En la comisión del Congreso que investiga la crisis financiera, Manera ha explicado que su papel se limitó a seguir la propuesta del Banco de España de fusionar las Cajas de Ahorro, operación por la que pasó a formar parte de BMN en 2010, junto a Caja Murcia, Caja Granada y Caixa Penedès.
El exconsejero ha considerado que el tamaño de Sa Nostra «no permitía realizar aventuras individuales» y, en su opinión, tampoco se contempló la opción de nacionalizar la entidad -como ocurrió con Bankia-, ya que hubiese supuesto «la quiebra del Govern» balear.
Además, Manera ha rechazado que hubiera «presiones políticas» en la toma de decisiones de la Caja y ha culpado a los directivos y a su «codicia» de poner en marcha proyectos inmobiliarios en Las Vegas y en Miami (EEUU) que, finalmente, no fueron desarrollados.
Sobre estas operaciones fuera de España, el extitular de Economía balear ha indicado que se realizaron antes de la crisis económica y que, ya entonces, le hicieron sospechar de la existencia de «problemas» en la entidad, al suponer operaciones «excesivamente arriesgadas».
Durante su comparecencia en la Cámara Baja, Manera apuntó que los directivos de las entidades estuvieron entre los causantes de la crisis económica al estar «muy apalancadas» en los bienes inmuebles, lo que provocó la «pérdida de confianza y numerosas dificultades» en los mercados.