La presidenta de la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillados (Emaya), Neus Truyol, ha informado este viernes de que dos empresas y un particular han confesado ser los responsables de un vertido de residuos irregular en un solar de Puntiró y ha comunicado que estos deberán pagar una sanción de 3.000 euros por «su mala praxis», así como un total de 4.400 euros para la limpieza y restitución de la zona.
«Emaya detectó el vertido ilegal de residuos en una zona de Puntiró que, además, está alrededor de una zona boscosa, lo que tiene un efecto negativo sobre el medio ambiente y supone un peligro de incendio», ha señalado Truyol durante una rueda de prensa en Cort.
De este modo, la presidenta de Emaya ha apuntado que la mayoría de los vertidos depositados en el solar eran «muebles, trozos de madera e incluso electrodomésticos» y ha insistido en el peligro que supone abandonar de manera irregular este tipo de restos «y más si la zona está rodeada de zonas vegetales que podrían generar un incendio».
No obstante, ha recordado que, «aunque hay empresas que hacen una mala gestión de los residuos y los vierten en zonas naturales», a lo largo del año 2017 se ha reducido a la mitad la cantidad de restos de obra abandonados en la vía publica, logro que Truyol ha atribuido a la creación de puntos verdes en el Polígono de Son Castelló.
Asimismo, ha informado de que una de las empresas se encuentra fuera de Palma por lo que, a su juicio, «esto demuestra que estas malas prácticas no se dan solo dentro de nuestro municipio sino que sobrepasan las fronteras de la ciudad».