La presidenta de Baleares y secretaria general del PSIB-PSOE, Francina Armengol, ha afirmado este jueves que tiene una «sensación muy cierta» de que sus compañeros quieren que sea de nuevo la candidata a la presidencia del Govern con ocasión de las elecciones autonómicas del próximo año.
«Tengo una sensación muy cierta de que mis compañeras y compañeros piensan que debo repetir como candidata en 2019», ha dicho Armengol en una entrevista a IB3 Ràdio con ocasión del Dia de Balears.
Armengol ha mantenido que su partido es el «más democrático de todos» y, por lo tanto, si alguien más opta a ser el candidato a las próximas elecciones autonómicas «iremos a primarias».
«No tendría ningún problema en hacer unas primarias» para elegir al candidato o candidata, ha insistido Armengol, que también ha dejado claro que optará a repetir como número uno de los socialistas y como presidenta de Baleares.
Armengol ha subrayado que ella es partidaria de las primarias y así lo ha defendido en su partido porque pueden «estimular mucho a las organizaciones políticas».
Respecto al próximo secretario general de MÉS per Mallorca, Miquel Ensenyat o Fina Santiago, la presidenta de Baleares les ha deseado «suerte», ha destacado la «muy buena relación» que tiene con ambos y, sobre quién quiere que gane, ha respondido: «El que decidan los militantes de MÉS».
Preguntada por otros partidos, la líder socialista ha reconocido que a nivel estatal Ciudadanos (Cs) «está de moda», según revelan las encuestas, con «un gran apoyo de mucha gente bastante notorio».
Sobre Cs en Baleares, Armengol ha aludido a su planteamiento «muy liberal» en lo económico y a que «no se haya mojado» en temas políticos importantes de Baleares al estar ligado su planteamiento a lo decida el partido a nivel estatal.
«Evidentemente, Cs le quita votos al PP porque manejan un corpus ideológico muy parecido», ha manifestado la presidenta, que ha dicho que «intentará» que el PSIB sume el mayor número de votos del ámbito del centro-izquierda.
Sobre el PP balear, Armengol ha opinado que tiene un «problema de proyecto político» y, como ejemplo, ha recordado que cuando se aprobó la ley de símbolos sus diputados salieron del salón de plenos porque «no sabían qué votar», como tampoco saben si apoyar o no el alquiler en las viviendas plurifamiliares.
Por otra parte, el PP «vuelve a apuntarse al tema de la crispación» en torno a la lengua. «Tenemos un PP muy paralizado hacia donde debe ir y muy asustado porque Cs le puede quitar una parte importante de su electorado».
Mientras tanto, el actual Govern del Pacto tiene un proyecto político «más allá de 2019», ha dicho Armengol, que ha subrayado que «la izquierda es capaz de entenderse y de cumplir con su hoja de ruta ambiciosa que va más allá de una legislatura».