Dieciocho de los 33 directores insulares o secretarios técnicos del Consell de Mallorca que fueron nombrados a comienzos del mandato, en el año 2015, han dejado sus puestos en la institución en los dos años y medio que han pasado desde entonces.
Ello supone que ha habido cambios en más de la mitad de los departamentos del Consell y en algunos de los casos se ha producido más de un cambio en el mismo puesto de trabajo. Los últimos han tenido lugar en las dos últimas semanas, con la marcha de los directores insulares de Serehim Salord en la dirección insular de Promoció Sociocultural, el de Elena Carrillo, secretaria técnica de Modernització, y el de Catalina Canals, directora insular de Residus.
Solo queda un tercio
Si a estos cambios se añaden los creación de las nuevas direcciones insulares que asumirán las competencias que transfiera el Govern, el resultado es que del organigrama inicial presentado por el president de la institución, Miquel Ensenyat, apenas queda una tercera parte pasados dos y medio.
Los cambios han sido especialmente significativos en tres departamentos. En el que depende del conseller de Participació Cuitadana, Jesús Jurado, solo se mantiene desde el principio la directora insular d'Igualdat, Nina Parrón, a quien el PP acaba de pedir que sea consecuente y renuncie al cargo después de que un juez haya abierto juicio oral en su contra por calumnias. Por el departamento de Relacions Institucionals han pasado nada menos que tres directores insulares, por ejemplo. Benestar Social es otro de los departamentos cuajados de cambios. De todos los que comenzaron con la consellera Margalida Puigserver solo se mantiene el gerente del IMAS, Jaume Català, mientras que el resto de departamentos ha variado en su totalidad en algunos casos por partida doble y triple.
Pero el departamento con más cambios es el de Modernització i Funció Pública, que dirige Carmen Palomino. Ningún cargo de los que comenzó el mandato con la consellera sigue en su puesto dos años y medio después.