El Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) ha adquirido una vivienda situada en una finca de 1,5 hectáreas para alojar el centro de primera acogida y diagnóstico para adolescentes Tramuntana, que está previsto que abra en el segundo trimestre de este año, tras su adecuación, con 15 plazas.
El inmueble consta de 412 metros cuadrados construidos y está ubicado en una finca de 1,56 hectáreas dotada de garaje, almacén y equipamientos deportivos, ha informado el Consell de Mallorca en un comunicado.
El centro Tramuntana se trasladará a las nuevas instalaciones después de adaptar las instalaciones a las necesidades del servicio.
La consellera de Bienestar y Derechos Sociales y presidenta del IMAS, Margalida Puigserver, ha visitado este jueves la finca y ha destacado la importancia de esta adquisición, ya que permitirá a la institución «disponer de un centro propio de primera acogida para adolescentes».
El centro de primera acogida Tramuntana es un recurso propio del IMAS para la acogida residencial temporal y de diagnóstico para menores adolescentes que se encuentren en situación de desprotección. El centro, en su nueva ubicación, mantendrá las 15 plazas para menores de entre 13 y 17 años.
Se trata de un recurso para jóvenes con necesidad urgente de residencia y de diagnóstico sobre su situación de desamparo por parte del Servicio Menores. Ofrece cobertura y supervisión de todas las necesidades de los menores acogidos y está abierto las 24 horas del día todos los días del año.
En este tipo de centro, el ingreso de los menores se realiza de forma inmediata a la derivación realizada desde el Servicio de Menores, la Fiscalía de Menores, algún Juzgado, la Policía o la Guardia Civil.
El objetivo de este centro es proporcionar a los menores que lo necesiten un contexto seguro, protector, educativo y terapéutico para responder a las necesidades de salud, emocionales, sociales y educativas de acuerdo con su desarrollo.
También trabaja para ofrecer a las familias un modelo de intervención para favorecer la reunificación familiar y en caso de que ésta no sea posible, se prepara los menores y los familiares o tutores para las alternativas que se puedan dar.