La cadena de restauración mallorquina Skalop cerró 2017 con una facturación de 6,2 millones de euros, lo que supone un aumento del 1,5 % respecto a 2016.
En un comunicado, esta empresa, que cuenta con nueve restaurantes, destaca que atraviesa uno de sus mejores momentos y que la facturación, las ventas y el número de clientes han ido aumentado cada año.
En vista de estos buenos resultados, Skalop ha previsto un plan de expansión para este ejercicio que contempla el «salto» a la Península con el propósito de dar a conocer su marca.
La empresa, que abrió su primer local hace dos décadas, despachó el año pasado 750.000 tickets, por lo que la directora de expansión de Skalop, Marta Seguí, ha declarado que la compañía de restauración atraviesa «uno de nuestros mejores momentos».
«Contamos con una amplia experiencia en el mercado, una imagen de marca fuerte en las islas y, año tras año, el balance de ventas acaba superando nuestras expectativas», ha destacado.
El plato estrella del año pasado fue, una vez más, los escalopes con una venta de 820.000 unidades.
«La gran variedad de la oferta, la calidad de los platos y el precio asequible, con un ticket medio de 8,5 euros, nos posiciona como la elección perfecta» para una clientela tanto local como de turistas, ha declarado Seguí.