El personal de mantenimiento de Son Espases denuncia que hay fugas de agua en las placas solares térmicas y que la concesionaria del hospital «no hace nada para solucionar este problema porque el agua la paga directamente el IB-Salut y a la concesionaria no le importa nada que se esté perdiendo dinero público». Así lo explican los trabajadores de mantenimiento, quienes acusan a la UTE (Unión Temporal de Empresas), encargada de los servicios no clínicos del hospital universitario, de actuar «con absoluta dejadez». «Estamos cansados de denunciar que la concesionaria actúa con total impunidad y de pedir al IB-Salut que incremente el control del gasto y la fiscalización del trabajo de mantenimiento», explica el personal.
En Son Espases conviven actualmente trabajadores que proceden del equipo de mantenimiento del antiguo Son Dureta (a las órdenes del IB-Salut) y personal contratado por la concesionaria. El personal que proviene del antiguo Son Dureta denuncia que «la concesionaria nos entrega órdenes de trabajo, con un sistema telemático propio, para no poder ser fiscalizados por el IB-Salut. Este martes nos han entregado tres ordenes de trabajo no fiscalizadas por el IB-Salut», denunciaron los trabajadores y añadieron que «lo lógico es que el Govern aumente el control y evite que haya fugas de agua o continuos problemas de mantenimiento».
El problema radica, según los trabajadores y que ya han denunciado en otras ocasiones las organizaciones sindicales, en que están coexistiendo dos sistemas de comunicación telemática de incidencias en el hospital. El oficial, a través del programa informático Óptima del IB-Salut, y el de la UTE concesionaria, el Mansis XXI, «que el IB-Salut no puede fiscalizar», afirman.