El Consell de Mallorca no ve nada clara la propuesta del alcalde de Palma de limitar el tráfico en el Passeig Marítim con la transformación de esta vía en un bulevar. La consellera de Territori de la institución insular, Mercedes Garrido, ha pedido al Ajuntament de Palma que informe del proyecto y lo consensúe con el resto de administraciones afectadas para tratar de evitar que la limitaciones del tráfico en el Passeig Marítim tengan un efecto cascada y provoquen atascos en el resto de las vías de Palma.
«Los coches no desaparecerán de la noche a la mañana y no se puede intentar que, de repente, pase solo un coche por donde ahora pasan tres», afirma la consellera Garrido. La responsable de Carreteres del Consell considera que lo razonable es esperar a que hayan finalizado las obras de la vía conectora antes de poner en marcha el proyecto de bulevar.
El problema es que las obras de la vía conectora van con retraso y Cort tiene prisa por ejecutar esta reordenación de la zona. Las obras del tramo II de la vía conectora, las situadas en la zona más cercana a Son Ferriol, se han reanudado tras casi dos años paradas. El tramo I, que corresponde al enlace entre la autopista al aeropuerto y el centro comercial Fan, está pendiente de aprobar el proyecto y de adjudicar las obras.
En cualquier caso, y pese a la tardanza, Garrido teme que la propuesta de Cort acabe provocando «un lío enorme» si las infraestructuras no están acabadas. Añade que los problemas de movilidad son muy complejos de solucionar y pide que se estudie el caso con detenimiento.