La dirección general de Consumo ha intensificado en las últimas semanas las inspecciones con motivo de la fiesta de Halloween y ha realizado 93 actuaciones en una veintena de establecimientos de Baleares, donde ha inmovilizado 787 productos peligrosos como pelucas, disfraces o complementos.
A través de un comunicado, Consumo ha ofrecido a los consumidores diversas recomendaciones para festejar Halloween de manera segura y, al mismo tiempo, con un consumo responsable.
Se recuerda que hay que adquirir productos que, siempre que se cumplan las instrucciones de uso y las advertencias señalados, no impliquen un riesgo para la salud y la seguridad de los consumidores.
La compra de disfraces y de accesorios debe hacerse con los mismos estándares de calidad y seguridad que se exigen para cualquier otro producto, con independencia de que sólo se utilicen un par de días.
Se deben adquirir los disfraces, caretas y similares siempre teniendo en cuenta la edad del niño.
Los disfraces infantiles se consideran juguetes y, por tanto, deben ser adecuados a la edad del niño. Si son para un menor de 14 años, debe indicar las advertencias de seguridad.
Si son para un menor de 7 años, no puede llevar cuerdas ni cordones en la zona del cuello y, si son para más de 7 años, los cordones no pueden ser superiores a 7,5 centímetros de longitud.
Hay que comprobar que los complementos (arcos con flechas, pistolas, diademas, etcétera) no tienen partes puntiagudas, ni piezas pequeñas que puedan desprenderse y que impliquen riesgo de asfixia.
Las máscaras deben tener orificios de ventilación suficientes que eviten la asfixia y deben ser adecuadas para el tamaño y la edad de las personas que las empleen. Deben ser resistentes al fuego, al igual que las pelucas.
Hay que vigilar que el etiquetado indique como mínimo el nombre del producto, el del fabricante o importador, con la dirección incluida, la fecha mínima de caducidad, el número de lote y los componentes.
Las lentes de contacto cosméticas deben comprarse en un establecimiento autorizado, nunca en mercados, ni por Internet ni tiendas no autorizadas en las que no hay ningún tipo de garantía sanitaria.
Las debe prescribir un óptico-optometrista ya que deben cumplir con los mismos requisitos que las lentes de contacto correctoras.
Antes de adquirir un producto, se debe comprobar que tiene el etiquetado que corresponde.
En caso de que el producto pueda ser inflamable, debe constar la advertencia «manténgalo alejado del fuego». En este caso, es importante tener cuidado con el fuego y las fuentes de calor. Los disfraces, las pelucas y las máscaras deben estar fabricadas con materiales no inflamables o de baja combustión.
En cuanto a los aparatos de pirotecnia (bengalas, bombillas, petardos, etcétera), se debe tener en cuenta que sólo se pueden vender en establecimientos autorizados.
Hay que solicitar siempre y conservar las facturas o recibos de compra porque son la garantía y se pueden necesitar en caso de reclamación.
El establecimiento no tiene la obligación de aceptar cambios si el producto está en perfecto estado, por lo que es necesario informarse antes sobre la política de cambios.
Todas las empresas deben disponer de hojas de reclamación. Finalmente, Consumo recuerda que siempre es una garantía comprar en comercios adheridos al sistema arbitral de consumo.