El servicio de vigilancia de la posidonia ha asistido a 6.678 embarcaciones en Baleares con ocasión del operativo de verano puesto en marcha por la Conselleria de Medi Ambient para proteger la posidonia.
Las diez embarcaciones de este servicio han ayudado a 1.409 en Mallorca, 285 en Menorca y 4.984 en Ibiza y Formentera, ha informado este departamento autonómico en un comunicado.
Este servicio de vigilancia de la posidonia en las Islas Baleares, que ha llevado a cabo la empresa Solrac, ha estado vigente durante tres meses, de julio a septiembre.
El objeto del operativo ha sido la vigilancia de los hábitats marinos protegidos, especialmente con respecto a las fanerógamas marinas, como la posidonia oceánica.
Esta iniciativa ha servido para informar sobre la prohibición de los barcos de la zona de fondear sobre la posidonia oceánica y también ha dado apoyo y asesoramiento a barcos en las tareas de fondeo en las zonas arenosas.
Este servicio ha supuesto un gran impulso para la protección de las praderas de la posidonia y la concienciación de los patrones y los ciudadanos de los daños que hacen las anclas a las praderas.
Se han realizado tareas de vigilancia en los ámbitos marinos, se han difundido pegatinas y folletos entre los patrones de las embarcaciones y se ha dado apoyo y asesoramiento para el fondeo y el desfondeo, principalmente a embarcaciones con esloras comprendidas entre 15 y 110 metros.
Estas salidas han sido coordinadas entre la Guardia Civil y los agentes de Medi Ambient. También se ha informado sobre otras incidencias relacionadas con la conservación de la naturaleza e incluso se han llevado a cabo inmersiones con los buceadores profesionales para determinar zonas de fondeo dudosas.
Según el conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, «este dispositivo quiere evitar el impacto sobre la posidonia y que el próximo año tengamos que hablar de unas cifras inferiores de actuaciones».
Además, Vidal ha recordado que fondear sobre la posidonia está prohibido y que el decreto de la posidonia establecerá los criterios sobre este asunto y las medidas que se deben tomar.
Por otra parte, en el momento de máxima tensión por la campaña de incendios, «los agentes de Medio Ambiente se han embarcado en 90 ocasiones en las mismas embarcaciones de vigilancia para reforzar el servicio».