Cort estudia no dar más licencias para el servicio de galeras y promover la sustitución a medio plazo del carruaje tirado por caballos por un vehículo eléctrico. Ese es el objetivo final, pero mientras tanto, las áreas de Mobilitat y de Benestar Animal, está llevando a cabo una revisión del reglamento del servicio de transporte urbano de viajeros con vehículos de tracción animal con conductor.
Según se informó el Consistorio, en estos momentos se está redactando la nueva ordenanza, que se basará en dos principios: Garantizar el bienestar animal y la calidad de la prestación del servicio. Para ello se está estudiando añadir elementos como limitar el horario de trabajo de los caballos, medidas especiales por olas de calor, incrementar los controles e inspecciones de bienestar animal y prestación del servicio e imponer sanciones que supongan la prohibición de la prestación del servicio en lugar de sólo sanciones económicas.
Dentro del marco de esta modificación, Cort solicitó a la Conselleria de Treball que revisara la situación laboral de los titulares de las galeras para confirmar que estuvieran dados de alta en la Seguridad Social como autónomos. Los resultados de 2016 han sido 17 actuaciones, 13 de las cuales concluyeron con incidencias con una propuesta de sanción de 46.657,04 euros. Durante 2017 se han realizado 28 actuaciones para comprobar la situación laboral de los trabajadores por cuenta ajena de las galeras, que actualmente se están revisando.
Además, el área de Mobilitat está tramitando este año 25 denuncias por incumplimiento del reglamento por cuestiones como, por ejemplo, parar en lugares no autorizados, tener el caballo en malas condiciones o llevar más pasajeros de los autorizados.En 2016 se tramitaron solo 7, eso supone que en un año las denuncias se han incremento en casi un 260 por ciento.