El proyecto de reordenación del Moll Vell de Palma ideado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava a petición del Govern de Jaume Matas, que incluye un palacio de la ópera flotante en medio de la bahía palmesana, estaba llamado a cambiar de forma radical la fisonomía del puerto de Palma, a través de la reforma de la manga de tierra que se adentra en el mar relativamente cerca de la Seu de Mallorca.
En su extremo se alzaría el edificio de la ópera, muy singular por poseer un techo desplegable e iluminación particular, según se muestra en la maqueta, cuyas imágenes han sido facilitadas coincidiendo con el día en el que su autor declara en el juicio del llamado caso Ópera.