El exconseller de Educació i Cultura Francesc Fiol ha declarado este martes que el expresidente del Govern Jaume Matas le indicó que la empresa pública Ibisec debía contratar a Santiago Calatrava para diseñar un palacio de la ópera en Palma y le comunicó que el coste del anteproyecto rondaría el millón de euros.
Estas afirmaciones, realizadas por Fiol como testigo en el juicio contra Matas por presunto tráfico de influencias en la contratación del arquitecto valenciano, contradicen la declaración previa del acusado, que había declarado que no sabía quién decidió realizar el proyecto a través del Ibisec y que nunca supo cuál era el precio planteado por Calatrava.
El exconseller ha explicado en la vista ante la Audiencia de Palma que cuando por primera vez le comunicó su idea de reordenar el muelle viejo de Palma y ubicar en él un edificio cultural emblemático Matas le indicó que el diseñador de ese anteproyecto debía ser Calatrava y le encargó impulsar el proceso para que se llevase a cabo.
«Seguí sus indicaciones», ha declarado el testigo, quien ha manifestado que en el seno de su departamento hubo dudas sobre la legalidad de contratar sin concurso al arquitecto elegido por Matas, pero un informe jurídico externo avaló el procedimiento administrativo finalmente elegido.
Fiol ha defendido el interés público del anteproyecto y la celeridad para que se pudiera hacer público antes de las elecciones de junio de 2007 para presentarlo dentro de la «hoja de servicios» del Govern de Matas. «Esto es el hábitat de la política», ha manifestado.