La Audiencia de Palma ha acordado aplazar el juicio al expresidente del Govern Jaume Matas por encargar el diseño de un teatro de la ópera en Palma, que estaba previsto entre el 10 y el 12 de julio, para que se transcriban de varias declaraciones tomadas durante la investigación del caso y que fueron grabadas.
La sección segunda del tribunal provincial fijará próximamente nuevas fechas.
La Fiscalía Anticorrupción acusa a Matas en esta pieza de prevaricación y tráfico de influencias y pide para él una condena a 1 año y 3 meses de prisión.
Matas confesará parte de los hechos en el juicio por el encargo al arquitecto Santiago Calatrava el diseño de un teatro de la ópera en Palma, según indicó su abogado, José Zaforteza, en una vista previa celebrada el pasado abril en la Audiencia de Palma.
El expresidente y ex ministro de Medio Ambiente no está conforme con la pena solicitada por la Fiscalía Anticorrupción ni acepta la cuantía en concepto de responsabilidad civil que propone el ministerio público.
Matas es el único acusado en este procedimiento, relativo a la adjudicación y presentación de un proyecto para construir el teatro de la ópera que encargó a Calatrava justo antes de las elecciones autonómicas de 2007.
La Fiscalía pide que sea condenado a 1 año y 3 meses de prisión, multa de 120.000 euros e inhabilitación durante 10 años.
Matas anunció exactamente un mes antes de las elecciones de 2007 la construcción frente a la catedral de Palma, en la zona del muelle viejo, de un edificio emblemático dedicado a la representación de óperas, a modo de «golpe de efecto» para la campaña, según la Fiscalía.
Anticorrupción considera que Matas era consciente de la imposibilidad material y económica del proyecto pero contactó con Calatrava e intentó dar apariencia de legalidad a su contratación por presentar un anteproyecto dos maquetas y un vídeo por 1,2 millones.
El mismo día que Matas anunció el proyecto se había aprobado su adjudicación. La Junta Electoral prohibió la presentación del proyecto, pero aunque no se produjo, el Govern abonó varios costes