El Consell de Mallorca prepara un cambio en la ordenanza de usos de Raixa para eliminar la posibilidad de celebrar bodas o banquetes privados y darle un carácter mucho más cutural y protocolario al recinto propiedad de la institución insular.
El vicepresident de la institución, Jesús Jurado, aseguró que el propósito del Consell es dar «un impulso» al centro, con la celebración de actividades culturales, además de otros actos protocolarios de mayor rango.
Durante este verano tienen previsto comenzar las actividades, que se centrarán en la celebración de conciertos o de representaciones teatralizadas que tienen que ver con la historia de esta possessió. El propósito es que el nuevo plan de usos del recinto fije la celebración de actuaciones durante todo el año, según explicó Jurado.
Las instalaciones de Raixa se podían alquilar hasta ahora para eventos privados bajo pago de entre 300 y 2.000 euros en función de la zona alquilada. La realidad es que jamás se ha alquilado para una fiesta privada, o al menos no les consta a los actuales responsables de la institución. Que no se puedan hacer bodas no significa que no se convoquen actos privados y, de hecho, en las instalaciones sí se han celebrado diversos rodajes de películas o de anuncios publicitarios. Estos usos seguirán permitidos, y también se mantendrá la posibilidad de alquilar zonas para conferencias o convenciones.