El programa de Reinserción Social para Población Penitenciaria y Expresidiarios del Instituto Mallorquín de Asunto Sociales (IMAS) ha puesto en marcha un nuevo servicio de acogida residencial para expresos en situación de exclusión social que gestionará la Pastoral Penitenciaria y dispondrá de 10 plazas.
Ante la incorporación de este nuevo servicio, el IMAS ha incrementado la dotación económica del programa hasta 221.000 euros anuales, un 56,6 % más que el año pasado, ha informado el Consell de Mallorca en un comunicado.
La consellera de Bienestar y Derechos Sociales y presidenta del IMAS, Margalida Puigserver, y la directora insular de Inclusión Social, Teresa Vallespir, han visitado este mediodía las viviendas del nuevo servicio residencial para expresos, acompañadas por el responsable de Pastoral Penitenciaria, Esteban Serna.
El programa tiene como principal objetivo dotar de instrumentos para la reinserción a las personas que hayan estado encarceladas y que estén en situación de exclusión social para evitar su reingreso en prisión.
Los destinatarios del servicio de alojamiento son personas en situación de exclusión social, sin hogar, mayores de edad y que hayan cumplido condena en el Centro Penitenciario de Palma.
«Este nuevo servicio se incluye dentro del nuevo modelo de atención centrado en las personas por el que estamos apostando desde todas las áreas del IMAS, y supone una importante mejora en la atención a este colectivo», ha asegurado Puigserver.
El programa de Reinserción Social para Población Penitenciaria y Expresos del IMAS, consta de un programa de preparación para la salida de la cárcel y otro de apoyo para los presos en situación o riesgo de exclusión social que ya han salido del centro penitenciario.
En la primera fase, todavía en la cárcel, se ofrece orientación al preso con el objetivo de preparar su salida y favorecer el aprovechamiento de los talleres y cursos de iniciativa laboral que se realicen en el centro penitenciario.
Una vez fuera de la cárcel, se pone en marcha la segunda parte del programa, la de acompañamiento y reinserción, que consta de cuatro grupos de tareas; apoyo a la persona en sus necesidades individuales; cobertura de las necesidades básicas (entre las que se incluye este nuevo servicio de residencia); acompañamiento y seguimiento individual y actuaciones para favorecer la reinserción sociolaboral.