Una ex colaboradora del catedrático de la Universitat de les Illes Balears (UIB) Pablo Escribá ha afirmado este jueves que ella misma recomendó el producto a la madre de una amiga porque les habían dicho «que funcionaba con humanos».
Así lo ha indicado a los medios tras declarar durante más de una hora ante el juez de Instrucción número 9, Enrique Morell. No obstante, ante las preguntas de lo periodistas, la investigadora ha evitado especificar si fue Escribá quien le dijo que el producto funcionaba con humanos.
«Lo que funciona en ratones no tiene por qué funcionar en humanos», se ha limitado a explicar.
Esta colaboradora estuvo en el equipo de Escribá entre 2006 y 2013 y abandonó el equipo porque «no le gustaba lo que pasaba», según ha indicado.
Asimismo, la mujer también ha señalado que ha corroborado ante el juez las declaraciones que hizo en su momento a la policía.