La Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ha iniciado la campaña de control de serpientes en las Pitiusas, intensificando el esfuerzo en la técnica del trampeo, según ha destacado el Govern, que ha recordado que en Formentera hay operativas 150 jaulas y se han eliminado ya 201 serpientes, según ha declarado el conseller Vicenç Vidal.
Las serpientes en Formentera parecen haberse expandido ligeramente ya que se ha capturado alguna fuera del área donde el año pasado habían sido detectadas.
Este año se aplicará el mismo método que en 2016, aunque la campaña ha empezado en abril y se prolongará hasta noviembre para establecer la densidad de serpientes en Ibiza y Formentera y elaborar un estudio para evaluar el posible impacto sobre la biodiversidad.
En Formentera, según el Govern, se ha diseñado un protocolo de cobertura regular del territorio, con una jaula cada cuatro hectáreas, una densidad que se irá incrementando sucesivamente hasta estabilizar el ritmo de capturas.
Vidal ha destacado que, «desde el primer momento que se trasladó la preocupación de la invasión de las serpientes, hemos actuado tomando medidas y, año tras año, hemos ido generando conocimiento y retos a superar. Este año hemos querido dar un salto cualitativo con una nueva metodología de trabajo y efectivos que destinamos a esta campaña».
Desde Formentera han agradecido al Govern los medios materiales y logísticos y el trabajo de un técnico nuevo destinado a la isla para esta tarea. Además, se ha insistido en la necesidad de pedir al Ministerio un sistema de control de entrada de los olivos, principal vehículo de llegada de estas especies invasoras.
En este sentido, según ha dicho el Govern, el Ministerio ya ha recibido el documento elaborado por Baleares y Canarias para la redacción de la estrategia nacional de control de ofidios invasores en las Islas con el que «queremos que se analice jurídicamente y técnicamente el transporte de grandes árboles ornamentales, especialmente olivos, de la península a las islas», ha subrayado el conseller.
Vidal ha asegurado que miembros de la Conselleria se han reunido en Ibiza con el sector de viveros para analizar conjuntamente este problema y «he constatado que la disposición para colaborar es positiva».
Con el nuevo proyecto, el territorio se ha diferenciado de acuerdo con el tipo de hábitat, dividiéndolo en cuadrículas de una hectárea y con un resultado final de 45 polígonos humanizados, 18 de costa y 34 forestales y cultivos. Así, se hará una distribución de 150 jaulas, una por polígono.
MÁS HEMBRAS QUE MACHOS
Desde el Govern han destacado los resultados del estudio 'Ecología de la serpiente blanca (Rhinechis scalaris) en la isla de Formentera' sobre los ejemplares capturados durante 2016.
Del total, se han analizado 300 ejemplares y se destaca que la serpiente blanca es una especie que fue introducida en Formentera en 2006 de manera accidental a través del comercio de olivos ornamentales.
Como especie introducida puede causar un grave desequilibrio sobre la estructura y dinámica de los ecosistemas insulares y sobre otras especies. Los resultados han demostrado que la población de serpientes se encuentra bien estructurada, habiéndose encontrado individuos de todas las clases de edad, así como una gran proporción de juveniles.
Las hembras son mucho más abundantes que los machos, observándose hasta cuatro veces más hembras que machos. Este hecho podría explicar la elevada densidad de serpientes en Formentera. Además, se ha podido comprobar que cerca del 40 por ciento de los contenidos estomacales analizados presentaban al menos un ejemplar de lagartija pitiusa, habiéndose encontrado hasta un máximo de siete dentro del estómago de un ofidio.
Según ha dicho el jefe del Servicio de Protección de especies, Joan Mayol, «el estudio de los ejemplares capturados de especies invasoras es de vital importancia para incrementar el conocimiento de su ecología, permitiendo así redirigir las acciones de conservación y optimizar los esfuerzos de control de las especies invasoras».