El vicepresidente del ejecutivo balear y conseller de Turismo, Biel Barceló, ha afirmado este martes en el Parlament que «los ciudadanos de Baleares no han sido engañados ni por mi persona, ni por nadie del Govern».
El diputado del PP Antonio Gómez ha manifestado, con ocasión de una pregunta de control al gobierno, que la «única salida» que le queda al vicepresidente es dimitir tras conocerse que consellerias de MÉS han contratado en esta legislatura a dos empresas del exjefe de campaña de MÉS, Jaume Garau.
Gómez le ha echado en cara a Barceló que haya sido «muy valiente exigiendo responsabilidades a los demás» y que ahora no sea «un buen ejemplo a seguir de aquello que predicaba».
El diputado popular se ha referido a las «graves sospechas» que recaen sobre el vicepresidente por haber dado «contratos a dedo a su amigo, compañero de partido y director de su campaña electoral, lo que nos lleva a pensar que podemos estar ante una jugada para pagar la campaña electoral con dinero público».
Además, Gómez ha afirmado que Barceló «tiene pánico a dimitir», aunque es «la única salida honrosa que le queda, como mínimo por hacer un uso poco ético» de los recursos públicos.
En su respuesta, el vicepresidente ha recordado que hace unos días compareció en comisión parlamentaria para tratar sobre la «legalidad» de «todos» los contratos concedidos a Jaume Garau y que dio «explicaciones exhaustivas» y que, si es necesario, lo volverá a hacer.
Barceló ha criticado al PP su actitud en la oposición de poner en marcha el «ventilador» con «falsedades» y le ha pedido a Gómez que «mire hacia su partido» y los casos de corrupción que afectan a los populares.
«Muchas palabras, muchas sospechas, pero usted no tiene ninguna prueba de todo lo que ha dicho», ha afirmado Barceló.