Las reservas marinas de Malgrats y El Toro han incrementado sus poblaciones de peces en 2016, según ha anunciado la Conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca, que atribuye este aumento a las actividades reguladas y a la vigilancia.
Así lo ha expuesto este lunes el conseller Vicenç Vidal durante la presentación de los datos de seguimiento de las actividades reguladas y del seguimiento de las poblaciones de peces vulnerables en la pesca correspondientes al año 2016.
Los resultados de la última campaña -correspondientes a junio de 2016- han mostrado datos de biomasa de peces de 49 Kg de pez por 250 m2 en la isla de El Toro, que la Conselleria califica de «inaudita» por ser «la mayor nunca registrada en el Mediterráneo español».
Asimismo, el resultado es de 12 Kg/250 m2 en las islas Malgrats, mientras que a las zonas control, ubicadas en cap Andritxol y Rajolí (fuera de la reserva) no superan los 2,5 Kg/250 m2.
Además, mientras que las Malgrats muestran síntomas de saturación -no hay cambios desde 2006- en El Toro se continúa incrementando la biomasa de peces y en 2016 todavía no se ha alcanzado el punto de saturación.
Por ello, la Conselleria ha explicado que de este modo la isla de El Toro es, en términos técnicos, un 'hot spot', una zona que, por causas geográficas y ambientales no sigue los parámetros habituales de saturación y donde es probable que se pueda incrementar durante años la biomasa de peces hasta valores muy altos.
En cuanto a las especies que más han aumentado, destacan las depredadoras de hábitos sedentarios, en particular las diferentes especias de meros, los corvallos, los dentones y los sargos. En todos los casos, la biomasa se incrementa además por el aumento del número de peces y por el incremento de su talla.
La última campaña de censos de peces se hizo en 2011 con una cierta «preocupación» por comprobar si la reducción de la vigilancia a partir de 2012 había tenido consecuencias, ha indicado la Conselleria.
En este sentido, la Dirección General de Pesca y Medio Marino y financiado por el Fondo para favorecer el Turismo Sostenible tiene prevista la incorporación de nuevas embarcaciones y equipos de vigilancia antes del verano de 2017.
Las reservas de las islas Malgrats y de la isla de El Toro cuentan, desde noviembre de 2004, con su Comisión de seguimiento, que ha celebrado su sexta reunión, a la que han asistido, además de los representantes de la Dirección General de Pesca y Medio Marino y del Ayuntamiento de Calvià, representantes de los pescadores profesionales y recreativos, de los centros de buceo, de los clubes náuticos y de la Sociedad de Historia Natural de Baleares.
En primer lugar, y con respecto al seguimiento de las actividades reguladas por la reserva (pesca profesional, recreativa y buceo), el hecho más destacable es el incremento sostenido de las inmersiones de buceo turístico (24.500 en 2016, 3.000 más que en 2015), que «posiblemente están llegando a un punto de saturación», según la Conselleria.
El incremento en el número de inmersiones se ha concentrado en los meses de septiembre y octubre dado que en los meses estivales ya se cubren todos los turnos y la cuota diaria. En este ámbito, la introducción, en 2013, de una tasa para bucear a las reservas «no ha provocado ninguna reducción de las inmersiones», han sostenido desde el Govern.
Asimismo, la dirección general de Pesca y Medio y Marino ha presentado los resultados del estudio 'WildSea Divers 2016', una auditoría ambiental de la práctica del buceo en diversas reservas marinas de Europa, explicando que, en líneas general, los centros que actúan en El Toro y Malgrats superaron «holgadamente» los controles.
Sin embargo, se plantea la posibilidad de crear una credencial ambiental para el buceo, tal como prevé hacer la Administración del Estado con el proyecto 'Pescares'.