La recogida de trastos se ha incrementado un 50 por ciento en los meses de diciembre y enero con respecto a los mismos meses del año pasado, lo que ha supuesto una «sorpresa» para la dirección de Emaya.
El aumento se traduce en que en el pasado mes de enero, por ejemplo, se recogieron de las calles de Palma 393,88 toneladas de voluminosos, frente a las 260,60 toneladas recogidas e enero del año 2016.
La presidenta de la empresa pública, Neus Truyol, reconoció que «no sabemos muy bien a qué se debe este aumento tan importante que se ha acelerado en estos últimos meses, realmente no lo esperábamos, no se ha dado en unos meses en los que se pudiera esperar, como por ejemplo antes de las vacaciones de verano, y no tiene nada que ver con los aumentos de meses pasados».
Truyol recordó que «los primeros meses del nuevo modelo hubo un incremento del 20 por ciento y a partir de ahí siguió creciendo mes a mes». En ese momento se achacó el aumento a que el sistema era cada vez más conocido y «como era más cómodo para los ciudadanos pues más y más personas se animaban a utilizarlo». Pero una subida del 50 por ciento no tiene una clara explicación, insistió la responsable municipal.
Una razón, argumentó, puede ser que sea una consecuencia de la mejora económica, «pero no puede ser la única causa», añadió, «porque el resto de indicadores, como la recogida de otros residuos, han experimentado incrementos mucho más modestos, del 3 o el 5 por ciento, y tampoco se han dado grandes subidas en el consumo eléctrico».
Otros motivos, apuntó Truyol, pueden ser que haya más personas adecuando sus casas para el alquiler turístico o el aumento de las reformas de casas o fincas.