Esperar el autobús podrá tener en breve un nuevo aliciente en Palma: las biblio-paradas, un proyecto en el que trabaja la EMT para el intercambio gratuito de libros por parte de los ciudadanos (bookcroissing), como ya existe en otras ciudades o países.
El concejal de Cultura, Llorenç Carrió, explicó este jueves en comisión que la iniciativa se realiza conjuntamente con Arquitectives y la Escola Superior de Disseny de les Illes Balears, que es la que se ha encargado del diseño (ver fotos) de los muebles que se instalarán en las paradas seleccionadas por el Ajuntament de Palma aprovechando la estructura de las mismas.
En un principio estos muebles se colocarán en ocho paradas, aún por determinar, y la idea, expuso Carrió, es nutrirlas inicialmente de fondos sobrantes del catálogo de las bibliotecas municipales, «hasta que poco a poco sean los propios usuarios los que aprovechen estos espacios para el intercambio desinteresado de libros».
El edil anunció este proyecto en respuesta a la propuesta presentada por Ciudadanos relativa al bookcroissing, por la que se insta al Ajuntament a promover la creación en los parques públicos de una red de contenedores bibliotecas para su uso y promoción de la lectura.