La portavoz del grupo municipal popular, Marga Durán, ha acusado al Ajuntament de Palma de llevar a cabo un «urbanismo a la carta», después de que el Consejo de Gerencia de Urbanismo haya aprobado esta semana la décima modificación puntual del Plan General, que afecta a gran parte de la ciudad.
Durán ha afirmado que esta modificación, la número 10 en esta legislatura, es una demostración de la existencia de un plan general «encubierto» que se está llevando a cabo desde el área de Urbanismo, ha informado el PP en un comunicado.
«Llevamos meses denunciando que el teniente de alcalde, Antoni Noguera no quiere sacar adelante un nuevo Plan General, ya que lo lógico hubiera sido que todas las modificaciones que se han realizado formasen parte del mismo», ha insistido Durán, para quien los últimos cambios son una constatación de su hipótesis.
La regidora ha anunciado que el PP defenderá una proposición en el próximo pleno en la que se instará al equipo de gobierno a aprobar inicialmente el nuevo Plan General de Palma dentro del primer semestre del 2017, tal y como se «vendió» al inicio de legislatura.
«Dudamos de que Noguera vaya a cumplir su palabra, ya que hemos tenido conocimiento de que ahora se están empezando a celebrar las reuniones previas a la redacción del nuevo Plan General con asociaciones y entidades», ha asegurado Durán.
La portavoz del PP considera contradictorio que, Noguera, «quien siempre ha alardeado de ser detractor de lo que él llama 'urbanismo a la carta' haya llevado a cabo 10 modificaciones puntuales del Plan General en menos de 20 meses, lo que supone una media de una modificación cada dos meses desde que se inició la legislatura».
Ha recordado que en noviembre el grupo popular ya denunció que Gerencia de Urbanismo modificó doce artículos del Plan General «sin previo aviso y sin ni siquiera aportar la documentación relativa a los cambios».
Durán ha destacado que el PP logró en el pleno de ese mes que las modificaciones no tuvieran carácter retroactivo «ya que podrían afectar seriamente a un buen número de proyectos que ya están en marcha, ocasionando un grave perjuicio a pequeñas y medianas empresas y, por supuesto, a sus trabajadores».
Sobre los nuevos cambios, la regidora Lourdes Bosch ha señalado que el PP aún los está estudiando pero que, si bien pretende evitar futuros problemas de convivencia a causa del ruido en ejes cívicos como Fábrica o Blanquerna, «lo cierto es que no soluciona los problemas existentes en la actualidad y podrían crearse otros nuevos a causa del elevado nivel de intervencionismo de las medidas».
Según Bosch, aunque se ha enfocado el cambio a los ejes cívicos, «la realidad es que afectan a un ámbito muchísimo más extenso como a todas las zonas que no son de polígonos industriales o de viviendas unifamiliares, es decir, Palma ciudad, además de todos los lugares en los que hay locales en planta baja».
«Noguera cree que con esta medida va a conseguir la proliferación de pequeños comercios y, aunque no dudamos de su buena intención, estamos en condiciones de afirmar que no basta, ya que no se debería tratar por igual a todas las zonas de la ciudad», ha dicho Bosch