La Asociación de Vecinos del Barrio de la Seu ha instado este martes al Ajuntament de Palma a reconsiderar su decisión de recurrir contra la sentencia judicial que ordena impedir la parada de taxis en la calle Mirador, junto a la Catedral.
«La intención del ayuntamiento ahora, según ha aparecido en prensa, es corregir los defectos administrativos y autorizar y señalizar una parada legal de taxis en el mismo sitio. Ante esta posibilidad, la entidad vecinal solicita a Cort que se replantee su postura» ha señalado la asociación vecinal en una nota.
En este escrito, la asociación explica que ha respaldado y asesorado a los vecinos que interpusieron el recurso contra la parada de taxis que el Ajuntament permitía al lado de la Catedral, y que antes de recurrir a la vía judicial, ha tratado de agotar las opciones de diálogo y las administrativas.
Asimismo, esta asociación apunta que ha denunciado en reiteradas ocasiones que la parada es ilegal y que los taxistas incumplen las normas establecidas por el ayuntamiento para usarla sobrepasando con mucha frecuencia la cantidad máxima de vehículos permitida, que es de ocho vehículos.
Según esta asociación de vecinos, el anuncio del Ajuntament de interponer recurso contra la decisión judicial o realizar las actuaciones para permitir dicho aparcamiento, «revela que sus responsables dan prioridad a los intereses económicos de un colectivo, sobre los intereses de los ciudadanos».
«Los vecinos no piden poder aparcar en el Mirador de la Seu. Lo que solicitan es que la prohibición de aparcar para preservar el entorno patrimonial de la Catedral afecte a todos, incluidos los taxis. No tiene sentido prohibir aparcar a los vecinos para poder colocar taxis en su lugar», ha matizado la asociación.
De forma similar se ha pronunciado este martes la Asociación de la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA), además de congratularse por la sentencia judicial, ha apuntado que «no entiende que el Ayuntamiento la quiere recurrir».
Según ARCA, en 2013 propuso al Ajuntament la retirada de coches aparcados y taxis del mirador de la Sede y de la plaza que se abre entre el abside de la Sede y el Museo Diocesano.
«Los taxis que aún permanecen en esta plazoleta provocan igualmente un impacto negativo y se puede considerar un agravio comparativo con los vecinos», ha señalado ARCA.
ARCA ha señalado que el espacio central de la plazoleta ubicada en la confluencia de las calles del Mirador y Palau, suele estar ocupado durante el día por taxis que esperan a sus clientes mientras visitan la Catedral, en ocasiones seis o más vehículos al mismo tiempo .
Tenemos el convencimiento de que si se buscase una alternativa para los taxis tal y como se ha buscado para los vehículos de los vecinas, la imagen patrimonial de Palma quedaría altamente beneficiada», ha indicado.
ARCA presentó la alternativa para los taxis que consistía en reservar reservando alguna plaza ante el Parlament, opción que comunicó en julio de 2015 al concejal de Movilidad.