El número de alumnos beneficiados por el programa de reutilización de libros de texto y material didáctico se ha incrementado este curso en 4.681 estudiantes respecto al anterior, gracias a un importante aumento de la dotación económica de la Conselleria d'Educació i Universitat con este objetivo.
Las familias pagan tanto por libros nuevos como por ya utilizados, aunque con un límite de cuatro años, considerados su vida útil», explica Jaume Ribas, director general d'Innovació i Comunitat Educativa.
Cuando acaba el curso, la familia retorna los libros. Por ello, el alumno debe ser especialmente escrupuloso y responsable en el cuidado de los libros, siendo este aspecto otro ámbito de su formación. Cuando son retornados, el centro los revisa y si su estado es bueno, serán reutilizados. Si no, los cambia por nuevos. El alumno que no ha cuidado sus libros puede ser penalizado en el curso siguiente a través del precio de los mismos.
Jaume Ribas señala que «el año pasado, dedicamos al programa 200.000 euros, pero este curso hemos podido habilitar 1.100.000 euros y otros 200.000 procedentes del Ministerio de Educación, por lo que hemos podido llegar a 1.300.000 euros».