La propuesta del president del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, de darle al aeropuerto de Palma el nombre de Ramon Llullha movido a la reflexión de los principales presidentes de las instituciones. Ensenyat se ha dirigido a ellos por carta.
La delegada del Gobierno, Maria Salom, afirma que «personalmente me gusta». Salom transmitirá y tratará esta posibilidad con el Ministerio de Fomento, que es el organismo con potestad para proceder al cambio de nombre.
No obstante, advierte que «deben analizarse los aspectos técnicos y jurídicos de la medida. No es sencillo cambiar el nombre de un aeropuerto tan importante como Son Sant Joan y habrá que comprobar qué pasos, plazos y problemas puede generar».
La presidenta del Govern, Francina Armengol, explica que «no tengo nada en contra de la medida».
Por su parte, Xelo Huertas, que este martes presidía pleno parlamentario, afirmó que «aún no he recibido la carta de Ensenyat». Pese a ello indicó que «desde una óptica personal me parece bien».
El alcalde de Palma, José Hila, afirma que «soy consciente de la importancia que tiene Ramon Llull para todos los mallorquines, pero no veo la necesidad de cambiar el nombre a Son Sant Joan. Por una parte, se mantiene un topónimo singular de Palma y por la otra se conserva una denominación conocida en toda Europa.