La tomadura de pelo protagonizada por José Ramón Bauzá el viernes de la semana pasada en la casa de Carlos Delgado en Santa Ponsa ha cosechado el efecto contrario al que esperaban sus patrocinadores. Jaume Martínez y su grupo, han iniciado el despegue hacia el congreso confiando en sus propias fuerzas y entendiéndose cada vez más con las gentes de Hablan las Bases, que encabeza Antoni Deudero.
Eso significa que José Ramón se ha quedado fuera de juego, con el solitario apoyo de Delgado, que curiosamente se dedica en la actualidad mucho más a la actividad privada que a querer volver a la primera línea política. Insisten en que Jaume Martínez «no tenía ni idea de que Bauzá estaría en la reunión de Santa Ponsa. Le tomaron el pelo» y destacan que «cada vez hay más predisposición a plantar cara en el congreso, aunque nadie descarta una candidatura de consenso».
En todo caso, estos grupos se sienten cada vez más fuertes porque «intuyen» la debilidad de Biel Company, «que no acaba de despertar entusiasmos entre una parte del sector regionalista» y también «ven cada vez más claros» los disimulados devaneos de Miquel Vidal para mantenerse en el vértice de la pirámide y sacar la cabeza en el último momento como candidato de consenso.
En este contexto, todo apunta a Jaume Martínez como candidato de estos grupos en el próximo congreso regional. Martínez tiene el problema de su imputación judicial, «de la que piensa salirse pronto». Pero «si en su caso fuese imposible» aseguran que tienen «alternativas», por ejemplo afirman que «Jaume Bauzá es un valor en alza». Es ese Bauzá sí tienen confianza.
El vacío que siente José Ramón «es enorme». Sus teóricos aliados le han dado la espalda. Y eso que defienden el principio de «cada militante un voto y no podrá estar más de ocho años en el mismo cargo», pero José Ramón Bauzá «sobra vaya donde vaya».