La Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado de Palma (Emaya) ha cedido la gestión de toda la recogida de ropa y calzado a Cáritas y Deixalles, que contarán con 160 contenedores específicos repartidos por la ciudad.
La sociedad pública y las dos entidades sociales han suscrito este martes un convenio por el cual la Fundación Deixalles y Cáritas de Mallorca se hacen cargo de la recogida de forma conjunta después de una etapa de tres años en la que, con acuerdos separados, han dispuesto en las calles de 30 contenedores propios cada una.
Con el nuevo acuerdo, a esos 60 contenedores se sumarán otros 100 aportados por Emaya y cada una de las entidades se hará cargo de una zona de la ciudad, según ha informado el Ajuntament de Palma en un comunicado.
El acuerdo establece que se hará una campaña divulgativa para informar de la cesión total del servicio y de que la ropa y el calzado que se recogerán debe ser apto para su reutilización.
Cáritas y Deixalles se comprometen a realizar la recogida con una periodicidad mínima de una vez por semana, de unificar la imagen de los contenedores específicos y de realizar su mantenimiento, limpieza y reparación.
El convenio tiene una vigencia inicial de 10 años prorrogables.
El año pasado se recogieron en contenedores de las calles de la capital balear unas 550 toneladas de prendas de ropa y zapatos y en los nueve primeros meses de este año se han retirado 500 toneladas, lo que representa un crecimiento del 16 % respecto al mismo periodo de 2015.