Los vecinos de Ciudad Jardín, el Molinar y el Coll d'en Rabassa han vuelto a amanecer este jueves sin agua, como ya pasase el lunes y el martes pasado.
Emaya no había informado previamente de este nuevo corte de suministro debido a que se trata de una nueva incidencia imprevista. «Lamentamos las molestias, cortes de agua a Ciudad Jardín, Coll d'en Rabassa y Molinar hasta las 17 horas. Rotura de un cañería», ha publicado la empresa municipal en su cuenta de Twitter este mismo jueves a primera hora de la mañana.
Muchos han sido los vecinos indignados con esta situación, que no entienden que Emaya no haya puesto solución ya a este problema con las tuberías de la zona.
La calle Llucmajor número 174 es donde se están llevando a cabo los trabajos de reparación. El pasado domingo la carretera ya tuvo que ser cortada, debido a un socavón provocado por la rotura de una tubería.
Por su parte, Emaya ha informado este jueves de que trabaja para reparar la fractura que se ha producido esta madrugada en la red de suministro de agua que transcurre por la carretera de Llucmajor a lo largo del Molinar, y que ha dejado sin servicio a los vecinos que viven entre el Portitxol y Ciudad Jardín.
El objetivo es «restablecer el servicio lo antes posible», indica en una nota de prensa la empresa municipal, que reitera sus disculpas a los vecinos del Molinar, Ciudad Jardín y Coll d'en Rebassa por las averías de esta semana en la red de conducción de agua potable.
Indica que en la medida de lo posible se utilizan otras vías de suministro para que el número de usuarios afectados en cada caso sea el mínimo posible y se trabaja para estabilizar los tramos de la tubería más afectados.
Una vez se consiga la estabilización, se planificará la intervención para resolver de forma definitiva la situación de esta conducción de agua.
Las averías en las tuberías de la red de abastecimiento de agua potable en estas zonas comenzaron el pasado domingo de forma reiterada, y han dejado a diario sin suministro durante unas horas a una parte los vecinos.
Estas averías se producen por la antigüedad de la conducción (más de 40 años), que se ve especialmente afectada en esta época del año, tanto por variaciones en el patrón de suministro de agua de la red de distribución debidos a los cambios bruscos de temperatura, por variación de estación y la disminución de los volúmenes de agua consumidos.