Una tesis expuesta recientemente en la UIB analiza cómo afrontaron los profesionales de la sanidad balear los recortes presupuestarios, que afectaron el derecho a la atención sanitaria a partir de 2012, y las acciones llevadas a cabo por los profesionales, especialmente desde el concepto de resistencia.
La tesis doctoral, cuya autora es Cristina Moreno, aborda los últimos momentos del sector de la salud en nuestro país desde la obra del filósofo francés Michel Foucault.
Repasa como realidades como la exclusión de la atención sanitaria de las personas «sin papeles» o en situación administrativa irregular, o el copago farmacéutico tienen un peligroso componente xenófobo, incorporado a las políticas de Estado en forma de promoción de la exclusión.
Éstas confrontaron con los valores éticos de los profesionales, y en algunos casos se vieron obligados a desobedecer estas políticas para garantizar el derecho a la salud.
Así, el análisis va más allá de la tradicional vinculación de resistencia con acciones de huelga y de protesta, y por ejemplo examina casos en los que los facultativos han atendido por «la puerta de atrás» a personas sin tarjeta, o han creado bancos de medicamentos o de productos sanitarios para las personas que no podían pagarlos.
También se han analizado diferencias y similitudes en el discurso profesional del personal médico y el personal de enfermería.
Con todo, surgen conflictos entre los propios profesionales sanitarios, cuando unos consideran que deben atender a las personas y otros quieren cumplir la norma; especialmente destacan las tensiones entre el personal sanitario y el personal administrativo.
La investigación apunta que las actitudes de los profesionales no siempre concuerdan: algunos son «ciegos» ante esta situación, otros profesionales sufren frustración, y otros, fruto de su coraje moral, deciden enfrentarse a la norma y seguir atendiendo a todos por igual, asumiendo llegado el caso los riesgos civiles o penales que de esta situación se puedan derivar.
La tesis, que concluye con la necesidad de promover una educación en ética a todos los niveles y, de forma especial, en los profesionales de salud, la han dirigido el doctor Joaquín Valdivielso, del Departamento de Filosofía y Trabajo Social, y la doctora Margarita Miró, del Departamento de Enfermería y Fisioterapia.