La Dirección General de Emergencias e Interior (DGEI) del Govern ha anunciado este miércoles que mantiene la activación de la fase del prealerta del Plan Cambal (Contaminación Accidental en Area Marítima) por la fuga de líquido refrigerante detectada en el cable eléctrico submarino que une Menorca y Mallorca en la zona de Cala en Bosch (Ciutadella).
Según han informado en un comunicado, se trata de una fuga de pequeñas dimensiones causada por dos fisuras en el conducto eléctrico, unos días después de que Red Eléctrica Española finalizara la reparación del mismo por una avería ocasionada el pasado 8 de julio, cuando el cable subacuático fue seccionado por el ancla de una embarcación fondeada ilegalmente.
La actuación coordinada desde Emergencias, el Ayuntamiento de Ciutadella, el Consell de Menorca y Salvamento Marítimo, así como de la empresa responsable de la conducción eléctrica, ha permitido que el escape haya sido rápidamente controlado y no haya llegado a tierra.
Una vez se han detectado las fisuras, la empresa ha retirado la presión del fluido al mínimo con el fin de minimizar el volumen de la fuga y ha desplegado los medios necesarios para hacer una valoración de la gravedad de la avería.
Una embarcación de Sasemar también ha actuado con el fin de dispersar la mancha y técnicos de la DGEI y del Ayuntamiento de Ciutadella han decidido colocar barreras absorbentes en la bocana de Cala en Bosch con el fin de prevenir que el vertido llegue a la zona de baño.
A primera hora de este miércoles la embarcación de Salvamento Marítimo ha podido comprobar que no había restos del hidrocarburo en las zonas afectadas por el escape. Sin embargo la DGEI mantiene activada la fase de pre-alerta del plan Cambal y permanecen colocadas las barreras de absorción en prevención.
Por otra parte, la empresa eléctrica sigue con las tareas de reparación del cableado y ha puesto todos los medios necesarios por que las fisuras queden selladas lo más rápidamente posible. Además, continúa el operativo de vigilancia tanto desde tierra como desde el mar, con el fin de controlar la evolución del escape en las próximas horas.