El PSIB considera insuficiente la reforma de la ley autonómica de bienestar animal que centró en la prohibición de las corridas de toros y que todavía está pendiente de su aprobación definitiva en el Parlament. La presidenta Armengol incluso está dispuesto a que la reforma definitiva la impulse el Govern.
Las norma, que «todavía está en un estado incipiente» (según se ha explicado a este diario) se ocuparía de desarrollar cuestiones que ahora han quedado fuera y recogería reclamaciones de grupos animalistas aunque centrándose en animales domésticos que son sistemáticamente abandonados o que no tienen regulado un sistema de protección.
En Balears, según datos, se abandonan hasta 3.000 animales. La ley también se ocuparía de contrabando de animales y aumentaría las sanciones por el maltrato a los perros y a los gastos.