El concurso de belleza juvenil Miss Teen USA, en el que compiten chicas de entre 15 y 19 años, ha eliminado del certamen la competición en traje de baño, según informó este viernes la organización. Un desfile en ropa deportiva sustituirá al tradicional paseo. La decisión reaviva la polémica sobre sexualización de la imagen de la mujer en este tipo de eventos.
La compañía, que también organiza Miss Universo y Miss USA, argumenta que el concurso tiene que seguir los pasos de una sociedad «que cada vez prioriza más el feminismo y la igualdad», y dejar de lado una tradición que puede «parecer obsoleta» y que llevaba siendo criticada desde hacía años por «sexista». Existen diversidad de normas en cuanto a estas competiciones de belleza. En los certámenes de Miss World celebrados en Balears, así como en el resto de provincias españolas, el desfile en bikini se suprimió hace dos años. Sin embargo, otros concursos aún mantienen el tradicional desfile.
«Lo que queda obsoleto es el concurso en sí». Así de contundente se mostraba la periodista y directora de la revista Mujer y Salud, Leonor Toabada, ante el tema. Para la psicóloga Esperança Bosch, especializada en asuntos de género, se necesita «un análisis en profundiad y una revisión valiente de la situación» que, según ella, «no se hace porque significa enfrentarse a una industria muy potente como es la de la moda». Coronada Miss Balears en 2012, Marina Rosselló, opina que el cambio es positivo, ya que «el bikini está mal visto, porque se buscaban chicas hiperdelgadas». La directora del Institut de la Dona de Balears, Rosa Cursach, argumenta que «los desfiles de moda son elementos clasificadores de la mujer».