Los servicios de ITV en Palma e Inca están saturados después de que estas últimas semanas las nuevas cámaras de la DGT hayan multado a miles de conductores por no haberla pasado.
Como adelantó Ultima Hora, el nuevo sistema de control de Tráfico, que utiliza cámaras muy potentes para leer las matrículas y detectar automáticamente si el vehículo ha pasado la revisión de la ITV, se instaló en marzo, pero las primeras multas no han llegado hasta ahora a los conductores. Por eso, desde principios de junio, el centro de Inca y los dos que hay en Palma (el del polígono de Son Castelló y el de Can Pastilla) han visto doblarse la demanda de peticiones de cita previa.
La consellera insular de Territori i Infraestructures, Mercedes Garrido, aseguró que, hasta ahora, la espera era de «menos de cinco días», con lo que «si se pedía cita un lunes, el vehículo podía pasar la revisión esa misma semana». Ahora, sin embargo, de esos cuatro días se ha pasado a ocho, un incremento que también se ha producido en el servicio urgente de ITV, que permite pasar la revisión sin cita previa a quienes la tengan ya caducada (o les caduque el mismo día) si acuden al centro a las siete de la mañana.
La consellera afirmó que «estos últimos días ha vuelto a bajar ligeramente la demora para pasar la revisión». Sin embargo, también afirmó que, durante el mes de julio, la ITV pasa a tener horario de verano y, como sólo abre por las mañanas, «es posible que también se vea un aumento de la espera, que no tiene por qué estar relacionado con las multas».