La ley de protección animal, que prohíbe las corridas de toros, salvará finalmente el Correbou de Fornalutx, como reclamaban todos los partidos de ese municipio, incluido el PSIB a pesar de sus reticencias iniciales.
Según indicó este lunes el portavoz socialista, Andreu Alcover, se pactará una nueva redacción partiendo de las enmiendas de la oposición para que se busque una fórmula que permita mantener la tradición y que «el animal no sufra». Alcover aseguró que en estos momentos no sabía qué sistema podía limitar el sufrimiento.
La ley no se aprobará de forma inmediata, como inicialmente se preveía, y se pospondrá a septiembre, cuando se reanude el periodo ordinario de sesiones.
La diputada Magalida Capellà (Més) aseguró que eso impedirá que el Govern tenga que indemnizar por la suspensión de la corrida de toros que, tradicionalmente, se celebra en Palma en verano.
La otra corrida que, anualmente, se celebra en Mallorca es la de Muro. Margalida Prohens (PP) considera que más que el miedo a las indemnizaciones, los que de verdad provoca el atraso es la rebelión de los socialistas de Fornalutx. Es un problema añadido para el PSIB de cara a las elecciones.