El Banc de Llet Materna de la Fundació Banc de Sang i Teixits de les Illes Balears ha organizado un encuentro con las madres que han donado en este último año para agradecer su solidaria contribución al sistema sanitario.
En concreto, este pasado año 85 madres donaron 329,72 litros de leche que sirvieron para atender a 94 bebés, lo que representa un aumento de un 70% con respecto a un año antes.
Este jueves se conmemora el Día Mundial de Donación de Leche Materna, y la organización balear, que data de 2001 y es pionera en el país –hasta hace una serie de años era el único de estas características en todo el territorio nacional– recuerda la importancia de una labor de la cual se benefician principalmente los bebés prematuros, o con algún tipo de enfermedad que los hace más frágiles.
No en vano, este alimento es principalmente indicado para los recién nacidos que necesitan aumentar sus defensas.
Asimismo, actúa como protector del aparato digestivo, evitando en gran medida la aparición de la necrosis intestinal y facilitando la recuperación tras una intervención quirúrgica, y muchos facultativos lo consideran el mejor alimento para el pequeño.
El cometido de los bancos de leche es el de alojar y conservar la leche materna que, de manera altruista, donan madres que en aquel momento están amamantando a sus hijos. Por ejemplo, un bebé en estas circunstancias consume alrededor de dos litros de leche materna a la semana.
Pueden ser donantes todas las madres que estén dando el pecho y que gocen de una salud excelente, un proceso que tras los exámenes pertinentes realizan las mujeres cómodamente desde sus casas.
Es condición indispensable que no hayan transcurrido más de seis meses desde la fecha del parto, ya que en ese estadio la leche materna posee los nutrientes y agentes inmunológicos óptimos.