La incapacidad de los dos sectores enfrentados del PP por llegar a un acuerdo para proponer a un candidato se saldó este lunes con una inesperada favorita: Teresa Palmer. La delegada del Gobierno fue promovida bajo manga por la dirección nacional del PP, que le animó a que presentara su candidatura para poder elegirla como candidata alternativa a los que presentaban regionalistas y ‘rodriguistas'.
Dado que en la Junta Insular celebrada no hubo acuerdo, será la dirección nacional del partido quien elija de entre la lista de 23 candidatos que se le envió desde Balears. No hay confirmación oficial de que Palmer vaya a ser la candidata, pero los dos bandos enfrentados dieron por hecho que ni Pere Rotger ni Rogelio Araujo serán los elegidos en favor de la delegada. La reunión de la Junta Insular sirvió para que se volviera a poner de manifiesto la profunda división que existe entre los dos bandos del PP. Los regionalistas habían presentado a Pere Rotger y el rodriguismo, a Rogelio Araujo. Sin embargo, a primera hora de la tarde, Nuevas Generaciones se descolgó con una rueda de prensa, supuestamente no autorizada por el PP balear, en la que anunció la presentación de una docena de candidatos alternativos, entre ellos el propio secretario general del partido, Andrés Ferrer.
Cada uno de los candidatos intervino para defender su candidatura y Teresa Palmer aseguró que se veía con ganas y con fuerzas. Si finalmente es elegida, deberá dejar su cargo en Delegación del Gobierno ya que es incompatible.