El alcalde de Palma, José Hila, y el vicepresidente del Govern, Biel Barceló, han advertido este sábado de que tanto el Ayuntamiento como el Govern actuarán contra los empresarios que organicen fiestas etílicas «con todas las armas que tenemos».
Así de contundente se han mostrado Hila y Barceló en declaraciones a los medios durante una visita esta mañana a la Platja de Palma, en la que se han reunido con representantes de las asociaciones de vecinos de la zona para analizar el comienzo de la temporada turística.
«No toleraremos el turismo de borrachera», ha sido el mensaje conjunto que Ayuntamiento y Govern han querido lanzar este sábado, poniendo el acento en que lo que quieren es «turismo familiar o de actividades deportivas».
Decididos a acabar con este tipo de turismo «que afecta a la convivencia y a la imagen de Baleares», las instituciones han avanzado que actuarán «con todas las armas que tenemos» contra los empresarios que organicen fiestas etílicas como la que se produjo la semana pasada, cuando centenares de turistas se concentraron para beber en primera línea de Platja de Palma.
Estas actuaciones, han dicho Hila y Barceló, no se limitan sólo a los departamentos de Turismo sino que podrían producirse también desde Consumo o Trabajo.