La consellera de Transparencia, Cultura y Deportes, Ruth Mateu, ha opinado este martes en el Pleno del Parlament que el monolito de sa Feixina «todavía es un símbolo franquista», por lo que, según ha dicho, «está muy claro que no defiende las libertades democráticas».
Así lo ha apuntado en respuesta a una pregunta del diputado del Grupo Parlamentario Popular Alvaro Gijón quien se ha interesado por conocer la opinión de la consellera ante el inminente derribo de este monolito.
Con todo, la consellera ha indicado que «la voluntad de los ciudadanos de Palma es pasar página y tirar de ese monolito», y ha recordado que el compromiso del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma ha sido «eliminar este símbolo».
Además, ha añadido que las Asociaciones de víctimas del franquismo quieren que se retire» porque consideran que a día de hoy no se han eliminado del monumento los elementos que recuerdan al régimen.
«Los nostálgicos del régimen están en sus filas. Siempre encantados de dividir», le ha recriminado el diputado del PP a la consellera.