La Asociación de Usuarios del Tren ha dirigido un escrito a la Dirección General de Movilidad y Transportes en el que denuncia falta de seguridad en las instalaciones de Servicios Ferroviarios de Mallorca, así como deficiencias de mantenimiento e información a los viajeros.
Según la entidad, los trenes exprés provocan falta de seguridad a los usuarios que deben cruzar las vías para acceder a los andenes y además hay estaciones como Santa Maria, Binissalem y Lloseta con falta de visibilidad y dificultades de acceso, sin pasos a nivel para los peatones, lo que genera también inseguridad a los transeúntes.
En cuanto al mantenimiento denuncian dejadez, falta de limpieza, material estropeado, baldosas rotas en los andenes y rampas de acceso, falta de rampas adaptadas en las estaciones de Santa Maria y Binissalem, así como carencia de resguardo en la estación de s'Enllaç que obliga a los usuarios que realizan transbordos a estar a la intemperie.
La Asociación de Usuarios del Tren denuncia también falta de información mediante megafonía, pantallas o con mayor presencia de personal que gestione las incidencias en estaciones y trenes y se quejan de que los viajeros estén obligados a acudir a la estación intermodal de Palma para solucionar algunas de las incidencias, por lo que piden puntos de información en Manacor, Inca y Sa Pobla.
Los viajeros protestan también por los problemas informáticos que impiden que se puedan cargar en la tarjeta intermodal los títulos con descuento para familias numerosas, pensionistas o estudiantes, que deben comprar sus billetes diariamente.
Reclaman además mejoras en el servicio como que se amplíen los horarios nocturnos ya que el último tren sale a las 22.00 horas, que los usuarios tengan derecho al transbordo gratuito durante dos horas, que se unifiquen la tarjeta intermodal y la ciudadana del transporte público de Palma, que no haya limitaciones a viajar con bicicletas, la creación de un título de 10 viajes en tren y la ampliación a un año de la caducidad del título de 40 viajes.
La asociación pide además poder participar con voz aunque sin voto en las reuniones del consejo de administración de SFM para poder opinar sobre el servicio.