Un total de 865 personas se han examinado este sábado con el objetivo de conseguir una de las 100 plazas de chófer que oferta la EMT. Los aspirantes han afrontado la prueba teórica, que se ha desarrollado durante toda la mañana en 16 aulas del edificio Gaspar Melchor de Jovellanos de la Universitat de les Illes Balears.
La EMT creará un listado de 100 conductores para su incorporación a la empresa pública, 31 de los cuales comenzarán en su nuevo trabajo a principios de este año. Las 69 plazas restantes se irán contratando en función de las necesidades de la empresa que vayan saliendo y teniendo en cuenta el orden de puntuación.
El tribunal que se encarga del proceso está formado per cinco personas: dos del comité de empresa y tres representantes independientes, que son el licenciado en ciencias y catedrático de bachillerato Joan Miquel Escales; el ingeniero de Caminos, Canales y Puertos Miquel Femenia; y la catedrática de psicologia social de la UIB Maria Antònia Manassero.
La prueba de este sábado ha consistido en una evaluación de aptitudes que ha constado de un examen con 100 preguntas tipo test sobre temas como cononcimientos del código de circulación, de la EMT, de mecánica o de razonamiento verbal, entre otras. Si se aprueba, se valorará la antigüedad en la posesión del carnet de conducir D para, después, hacer una entrevista personal que harán aquellos que hayan obtenido una puntuación mayor. La entrevista personal solo supondrá 2 puntos de los 10 disponibles y tendrá un peso dentro de la valoració un 33 por ciento menor que en el proceso selectivo que se hizo durante el anterior mandado.