El Ajuntament de Palma reestructurará el organigrama de la Policía Local con el objetivo de dar prioridad a la proximidad, con un centenar de nuevos agentes que se sumarán a los 160 actuales, recuperando la figura del policía de barrio y aumentando también la unidad nocturna con entre 40 y 50 agentes, hasta alcanzar los 150.
La concelaja de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, considera que la filosofía con la que se ha realizado el nuevo organigrama es «volver al origen de la Policía Local que es la cercanía y la proximidad», ha explicado en la rueda de prensa donde ha presentado esta iniciativa.
La redistribución del personal dentro de la policía restará efectivos de seguridad ciudadana y de las unidades especializadas para añadirlos a las unidades de proximidad y nocturna y reorganizará los servicios para que «la gente joven y activa no esté haciendo trabajo administrativo».
«No puede haber tantas unidades especializadas y que el trabajo policial de aplicar las ordenanzas municipales quede de lado. No vamos a renunciar a la seguridad ciudadana pero hay que compensar la policía de barrio», ha defendido Pastor.
Dado que la Ley de Estabilidad Presupuestaria impide realizar una convocatoria de empleo público amplia para aumentar la plantilla, Cort solo podrá aplicar la tasa de reposición y en función de la disponibilidad presupuestaria revisada cada tres meses, un proceso «difícil pero que se tiene que ir haciendo sobre todo por edad de la plantilla», ha detallado.
La concejala cree que la reestructuración mejorará «sobre todo la visibilidad» y solucionará el problema actual de que «no se ve policía en la calle». En opinión de Pastor, dicha visibilidad «ahorra muchos problemas». «Es muy preventivo ver al policía de barrio, sobre todo en determinadas zonas conflictivas», ha recalcado, y ha indicado que en lugares como la Playa de Palma «es importante».
AUDITORÍA INTERNA
Pastor ha destacado también la creación de la Unidad de Auditoría Interna y Régimen Disciplinario, que sustituirá a la de asuntos internos creada por el gobierno anterior del PP y anulada por una sentencia y que se establece porque «no puede haber lagunas al aplicar el régimen disciplinario».
La concejala ha dicho no saber si se atajará de forma definitiva la corrupción que afecta al cuerpo y que se investiga bajo secreto de sumario por el Juzgado de Instrucción número 12, pero ha señalado que «se van a establecer controles que hasta ahora no hay y se va a hacer responsables a los mandos de lo que hagan sus efectivos».
«Los primeros que tienen que estar son los mandos intermedios, tanto apoyando a su policía en la calle como respondiendo del trabajo a su mando superior», ha afirmado.
«Vamos a trabajar con el tema de las responsabilidades y que todo el mundo colabore en la función de la Policía Local, porque no es la mayoría pero en según qué puestos una minoría mal organizada provoca una mala organización general y eso es lo que nos hemos encontrado en la Policía Local», ha insistido.
Se suprime la Patrulla Verde, que tiene varios de sus miembros investigados en la causa de presunta corrupción y donde «ha habido agujeros legales y de protocolo que han aprovechado algunas personas para hacer acciones dentro de la patrulla». La sustituirá la nueva Unidad de Control de Actividades y de Vigilancia Medioambiental.
La Comisaría de Tráfico y Seguridad Vial se intentará doblar porque Pastor la considera una de las más maltratadas en recursos humanos, con 22 policías motorizados en tres turnos que no llegan a toda la ciudad.
Además se creará una bolsa con unos 60 agentes para atender servicios específicos como pruebas deportivas o refuerzos en Navidad. También se reforzará con personal y medios técnicos la emisora, que está obsoleta y aún funciona mediante un sistema analógico, con solo dos teléfonos para atender a la ciudadanía.
Para mejorar la calidad, eficiencia y eficacia del cuerpo de seguridad, Pastor ha dicho que se revisarán y actualizarán los protocolos de actuación, que no se han renovado desde 2009 y están «totalmente obsoletos y desfasados en relación con la ciudad».
El nuevo organigrama deberá ser sometido a la negociación colectiva, pero Pastor cree que el proceso de renovación de la Policía Local es imparable. Ha dicho al respecto que su departamento lleva seis meses preparando la nueva estructura, para lo que ha contado con alta participación y se han recibido 137 aportaciones.
La mayor parte de las sugerencias hacen referencia a agravios comparativos dentro de unidades en materia de turnos, sueldos, horarios y tipo de servicios, por lo que Pastor ha abogado por volver a implantar la igualdad salarial y a nivel de funciones.
Pastor ha destacado que el presupuesto de Policía Local se ha incrementado un 12 % hasta 800.000 euros, a los que se añadirán 450.000 procedentes de la Ley de Capitalidad.