La Comisión Europea aprobó este miércoles un plan de 145 millones para el desarrollo rural de Balears cuyo objetivo es dar respuesta a las necesidades ambientales, económicas y sociales de las zonas rurales. Por ejemplo, cerca de un millar de agricultores y ganaderos de las Islas podrán beneficiarse de ayudas para modernizar sus explotaciones.
De los 145 millones que llegarán a las Islas, 61 proceden de la Comisión Europea y el resto es financiado por diversas administraciones, entre ellas la Conselleria de Medi Ambient, que dirige el conseller Vicenç Vidal.
El desarrollo rural se considera el segundo pilar de la política agraria común y la Comisión persigue dotar a los estados miembros de una dotación financiera que les permita actuar en este ámbito.
Entre las ayudas específicas que se incluyen en este programa de desarrollo rural, además de la modernización de las explotaciones agrarias están ayudas a jóvenes agricultores para que puedan poner en marcha sus propias empresas, contratos de apoyo a la biodiversidad y el paisaje y ayudas para el fomento de la agricultura ecológica.