Los jueces de instrucción de toda España han calificado de «inadmisible» que les limiten el tiempo de investigación de las causas y aseguran que la nueva ley tendrá «un efecto sumamente negativo».
Los magistrados han salido al paso de la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LEC) aprobada por el Gobierno, que prevé, entre otras cuestiones, la imposición de plazos de entre 6 y 18 meses, con la posibilidadad de ampliarlos hasta los 36 meses.
El juez decano de Palma, Francisco Martínez, que estuvo presente en las jornadas celebradas en Vigo, ha explicado a Ultima Hora que establecer plazos-límite en la instrucción «es una medida de carácter voluntarista que nada soluciona ni aporta».
«Además –subraya– traslada la idea de que son los jueces los responsables de la lentitud de los procedimientos, cuando su causa radica, precisamente, en la permanente escasez de personal y medios».
Los jueces de instrucción, asimismo, analizaron la situación de los juzgados de lo Social y la calificaron de «crítica».
En Balears hay seis juzgados que tramitan asuntos laborales y cuatro de ellos, los de Palma, sufren atascos importantes.