Un total de 452 aspirantes realizan en la mañana de este sabado en la Escuela de Hostelería de Palma, en el campus de la UIB, la primera de las pruebas selectivas para el ingreso en los centros docentes de formación que capacitan para ser guardia civil.
Forman parte de los 32.479 candidatos que harán las pruebas en toda España, en la mayor convocatoria para acceso a la escala de cabos y guardias de los últimos años, para cubrir 820 vacantes.
También en Madrid, miles de aspirantes se agolpaban al amanecer de hoy a las puertas de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense, para presentarse a la primera de las pruebas para conseguir alguna de las nuevas 820 plazas.
El 82 % de los aspirantes son hombres. Por primera vez, dado el número de aspirantes, 21 sedes repartidas por toda España, incluidas las islas, acogerán los exámenes, programados para la misma hora en todos los sitios.
Entre los opositores hay 25 que poseen un doctorado, 772 de ellos tienen un máster universitario, 3.028 son licenciados y 2.111 diplomados, teniendo otros formación profesional u otros estudios.
El concurso-oposición se divide en cuatro fases: prueba de conocimientos, pruebas físicas, reconocimiento médico y entrevista personal. La prueba de hoy consiste en un examen tipo test sobre conocimientos teóricos, idiomas, ortografía y psicotécnico.
En Madrid se examina el mayor número de candidatos, más de 4.500 registrados, por delante de la localidad jienense de Baeza (donde se encuentra la academia del Instituto Armado) y los 1.910 de la provincia de Granada.
Con útiles de escritura, pero sin mochila, teléfono móvil ni dispositivos electrónicos, según les indicaba un agente a la entrada, los aspirantes que se examinan en Madrid han ido accediendo a distintas plantas y zonas del edificio por grupos de apellidos.
A las puertas de las aulas se identificaban con el DNI al ser llamados por el nombre, aunque algunos no se han presentado a la prueba, cuyo comienzo estaba previsto a las 9:00 horas.
No se veía aún en Madrid cuando el tráfico era ya intenso en las inmediaciones de la Facultad de Derecho y parecía más un día lectivo cualquiera que un sábado por la cantidad de coches aparcados.
Si superan esta primera fase -un examen de ortografía y otro test general en el que pueden caer preguntas de todo tipo: jurídicas, de topografía, de electricidad, de legislación, etc.-, tendrán que someterse después a las pruebas físicas. Por vez primera la edad máxima para optar a la Benemérita se ha ampliado a los 40 años.