La Cofradía de Pescadores de Palma quiere obtener el visto bueno de las administraciones competentes para poder vender pescado fresco en el Port de Palma, para lo cual va a iniciar todos los contactos oficiales para conseguir el permiso necesario y la ubicación exacta en la zona del muelle de pescadores, según señala el patrón mayor de la Cofradía, Rafael Mas.
«Ni queremos romper el mercado ni hacer la competencia a las pescaderías, así como importunar a la empresa gestora de la distribución del pescado en Sa Lonja, Opmallorcamar. Nuestra intención es poder tener un puesto de venta en condiciones y con todos los controles sanitarios, así como el pago de impuestos, tasas a la propia Lonja y el IVA», apunta Mas.
La Cofradía de Pescadores de Palma afirma que la flota con la que cuentan «es la más sostenible del Mediterráneo, ya que tenemos unos 30 barcos de arrastre, 7 cerqueros y un centenar de llaüts destinados a la pesca con artes menores. La venta de pescado fresco que proponemos no llega ni al 1 % del total de toda la pesca fresca autóctona que se realiza cada día», añade Mas.
Los horarios de venta serían por la tarde, cuando llegan todos los barcos, entre las 16 y las 17 horas, y no duraría más de tres horas. El patrón mayor puntualiza que «la venta sería a partir de las 5 de la tarde y las cantidades ya están tipificadas de antemano por ley: 50 euros por persona/día y no se puede superar el 30 % del total de pescado». Mas añade que la habilitación de un puesto de venta en el muelle de pescadores «revitalizaría toda la zona portuaria, ya que vendría más gente y más negocio a toda la oferta complementaría allí existente».
Respecto a los precios que se establecerían, la Cofradía de Pescadores de Palma aclara que «los precios serían iguales a los de la Lonja, pero con la garantía y la frescura del día. Es por ello, que afirmamos que no se trata de romper el mercado, sino de dar un servicio más a los ciudadanos residentes de Palma».