La situación económica del matrimonio Torres-Tejeiro es crítica y ya se sitúa en términos de subsistencia «por debajo de la dignidad», según afirma el abogado Manuel González Peeters en el escrito que registró ayer ante el juez instructor del ‘caso Nóos', José Castro.
«Nadie les contrata, no pueden acudir al mercado laboral, de manera que su situación personal es, cuando menos, en el mejor de los escenarios posibles, crítica», señala el letrado.
El juez fijó una fianza de responsabilidad civil de 15.803.858 euros a Torres y Tejeiro. El exprofesor de ESADE, además, tuvo que constituir una fianza civil de 6,2 millones de forma conjunta con su exsocio de en el Instituto Nóos Iñaki Urdangarin.
El matrimonio tiene todos sus bienes embargados y viven de forma modesta en un lujoso chalet en San Cugat (Barcelona), que no pueden vender porque está embargado. Sin ingresos desde hace dos años, no pueden pagar ni la factura de la luz, según admitió el propio Torres en una entrevista en la revista Vanity Fair.
El juez autorizó que dispusieran de unos 100.000 euros trabados en una cuenta en Luxemburgo para sus necesidades básicas, pero rehusó ampliar esa cantidad de dinero.