El Grup Blanquerna reclama al Govern y demás instituciones implicadas que no firmen la adjudicación del Palau de Congressos de Palma antes de las próximas elecciones autonómicas y municipales del 24 de mayo, ya que según su opinión «existe el peligro grave de cometer un delito de prevaricación».
A través de un comunicado, el 'think tank' mallorquín califica de «escándalo» la readjudicación del Palau en construcción y del hotel anexo al Grupo Barceló, afirmando que si se cumplen sus cálculos más optimistas con esta operación, se perderán 40 millones procedentes de las arcas públicas.
También remarcan la importancia de que las fuerzas políticas que concurren a dichas elecciones «se pronuncien claramente sobre cuáles creen que deben ser los usos más adecuados para unas construcciones que han costado 110 millones públicos, de los que una parte importante no se esperan recuperar, mientras la empresa adjudicataria obtendría ganancias desde el primer día de explotación de una infraestructura pagada con dinero de los ciudadanos».
Por este motivo, llaman a la sociedad civil a movilizarse «para evitar esta nueva estafa y para conseguir el compromiso de todos los partidos para que las infraestructuras pagadas con dinero público no acaben dando beneficios a una empresa privada».
Recuerdan, asimismo, que cuando fue el momento de hacer frente a la inversión a que se había comprometido, el grupo turístico «se negó a cumplir su compromiso y chantajeó a las instituciones públicas».
Finalmente, se muestran partidarios de abrir un proceso participativo o un concurso de ideas sobre cuáles son los usos que hay que dar al edificio anexo a el que debe ser el Palau de Congressos, con la esperanza de revertir los millones de euros públicos en el interés general.
«Hay que recordar la necesidad de que Palma cuente con un hotel de entidades, al estilo de muchas ciudades, que permiten a las entidades sociales disponer de un espacio propio y de otros espacios compartidos para desarrollar su tarea», añaden, sin desestimar por el momento la opción de «concentrar en el edificio varios departamentos de la Administración», ahora dispersos y que generan alquileres muy elevados.