La crisis económica que afecta a Rusia, derivada de la invasión de parte de Ucrania y las sanciones que este hecho ha motivado de la Unión Europea y Estados Unidos, ha provocado en los últimos doce meses una devaluación progresiva del rublo, estimada en más de un 50%, lo cual ha mermado la capacidad adquisitiva de los rusos.
La patronal de los touroperadores rusa ATOR confirma que durante 2015, Balears registrará, por ello, una caída en picado de este mercado, cifrada en un 60 %, por lo que se pasará de los 120.125 turistas rusos de 2014 a unos 40.000.
A parte de la cuestión económica, el Gobierno que preside Vladimir Putin está poniendo todo tipo de trabas. «Hay una medida que sorprende, como es el hecho de que se haya prohibido a todos los funcionarios del Ministerio de Interior, que suman unos 17 millones, viajar al extranjero y tener que pasar sus vacaciones en los enclaves turísticos rusos», indican desde Moscú.
La patronal ATOR señala que el descenso del turismo ruso continuará hasta finales de 2016, «pero en 2017 se espera que se alcancen las cifras obtenidas en 2014 en todos los destinos turísticos, entre ellos los Balears».
El turismo español será el gran beneficiado por esta coyuntura, ya que los hoteleros de Balears están ofreciendo cupos de camas a los grupos turísticos españoles por la evolución al alza que este mercado tendrá durante toda la temporada estival en las Islas.